Bonds en el Olimpo
BBC Deportes |
 El número 755 de Bonds superó la valla del jardín izquierdo del estadio Petco de los Padres San Diego. |
Barry Bonds igualó la marca de más jonrones de por vida en el béisbol
de las Grandes Ligas al conectar el cuadrangular número 755 y así
alcanzar en el sitio de honor al legendario pelotero Hank Aaron, quien
fue dueño del récord por más de 30 años.
El jardinero izquierdo de los Gigantes de San Francisco
conectó el batazo de cuatro esquinas en su primer turno al bate
abriendo la segunda entrada ante el lanzador de los Padres de San
Diego, Clay Hensley.
La conexión se produjo tras un lanzamiento de bola
rápida que fue a parar detrás de la valla del jardín izquierdo del
estadio Petco de la ciudad de San Diego.
El comisionado de las Grandes Ligas, Bud Selig, estaba
presente en las gradas y apenas vio el batazo se levantó del asiento
para aplaudir al unísono junto a los miles de fanáticos que asistieron
especialmente al encuentro para ser testigos de la hazaña.
En el plato, Bonds fue recibido por su hijo Nikolai quien es el batboy de los Gigantes de San Francisco, a quien cargó por varios metros.
Bonds, siete veces galardonado como jugador más valioso,
no sólo está alcanzando la marca más deseada por cualquier pelotero de
Grandes Ligas.
El cuarto bate de los Gigantes posee el récord de más
jonrones en una temporada con 73, además de ser el bateador que ha
recibido el mayor número de bases por bola de por vida con más de
2.500.
Un pelotero perseguido por la polémica
En el año 2003 Greg Anderson, entrenador de Bonds para
la época, fue acusado en un tribunal federal por suministrar esteroides
anabolizantes a varios atletas, entre ellos, varios beisbolistas.
Anderson trabajaba para el laboratorio Balco, centro del escándalo.
Otras marcas de Bonds
Desde ese momento se desataron las especulaciones en torno a que Bonds
posiblemente usó cremas para mejorar su rendimiento físico
suministradas por su entrenador cuando no eran obligatorias las pruebas
antidopaje en las Grandes Ligas.
En un testimonio bajo juramento, Bonds se declaró
inocente y atribuyó los cambios en su desempeño físico a un riguroso
entrenamiento con pesas, una dieta estricta y suplementos vitamínicos.
Meses después Anderson se declaró culpable de
suministrar esteroides de manera ilegal y en estos momentos está tras
las rejas por negarse a testificar ante un gran jurado en torno a una
investigación que se le ha abierto a Bonds por perjurio, es decir, por
haber mentido durante su testimonio.
En todo caso, desde que las Grandes Ligas establecieron
chequeos obligatorios, Barry Bonds ha resultado negativo en todas las
pruebas antidopaje a las que se ha sometido.
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