Alí Hasan al-Majid fue uno de los personajes más influyentes de Irak
en tiempos de Saddam Hussein, y era conocido como "El Químico Alí" por
el papel que jugó en un operativo en el que se usaron gases tóxicos
contra los kurdos en 1988.
Al-Majid fue declarado culpable de genocidio en la campaña de Anfal y sentenciado a la horca.
Como primo del presidente iraquí, al-Majid se apoyaba en
dos pilares del régimen: la familia de Saddam Hussein y el Partido del
Renacimiento Árabe Socialista (Baas).
Antes de la caída del régimen, la prensa árabe lo veía
como un hacedor de reyes de la familia que tenía un papel importante en
la encendida rivalidad por la sucesión entre Qusay y Uday, los hijos de
Saddam.
Después de varios años sin un puesto ministerial,
al-Majid abandonó su posición tras bambalinas en los niveles superiores
del Partido Baas cuando Saddam Hussein puso al país en pie de guerra.
En marzo de 2003 fue designado jefe de la región sur, y
se convirtió en uno de los cuatro altos comandantes que informaban
directamente al presidente.
Las fuerzas armadas deben matar a cualquier persona o animal que se encuentre en su jurisdicción
Un mes después, funcionarios británicos declararon que estaban seguros
de que al-Majid había muerto durante un bombardeo aéreo de las fuerzas
de la coalición sobre Basora.
Pero en junio de ese mismo año, el secretario de Defensa
de Estados Unidos Donald Rumsfeld admitió que no sabía si al-Majid
estaba vivo o muerto.
Dos meses más tarde, oficiales del ejército estodunidense anunciaron que lo habían capturado.
Ofensiva kurda
Al-Majid fue nombrado gobernador del Norte de Irak en
1987, al inicio de una ofensiva conocida como "Campaña de Anfal" en la
que tropas iraquíes atacaron a la población kurda.
Para las organizaciones kurdas se trató de un genocidio.
Un decreto firmado por al-Majid el 3 de junio de 1987
declara: "Las fuerzas armadas deben matar a cualquier persona o animal
que se encuentre en su jurisdicción".
Según defensores de los derechos humanos, el ejército
iraquí procedió a matar a decenas de miles de civiles kurdos con gases
tóxicos y en ejecuciones sumarias.
Gobernador de Kuwait
La invasión iraquí a Kuwait terminó la carrera de al-Majid en el norte.
Tras la anexión del Estado en el Golfo Pérsico en agosto
de 1990, se convirtió de hecho en gobernador de lo que Bagdad
consideraba la decimonovena provincia de Irak.
Al-Majid dejó ese puesto en noviembre de 1990 y cuatro meses más tarde fue designado ministro del Interior.
El grupo británico de presión Indict lo acusa de
crímenes contra la humanidad por el papel que jugó en la represión de
los kurdos y el levantamiento chiita que se produjo cuando las tropas
iraquíes se retiraron de Kuwait.
Después de un período de cuatro años (1991-1995) como ministro de Defensa, fue relevado de sus deberes ministeriales.
Sin embargo, al-Majid continuó ocupando puestos
importantes en el Partido Baas: era integrante del Consejo del Comando
de la Revolución y dirigente partidista en la provincia de
Salah-al-Din, donde está Tikrit, la ciudad de Saddam Hussein.
Familiares desertores
La posición de al-Majid se vio amenazada en 1995, cuando
dos de sus sobrinos, Hussein Kamil al-Majid y Saddam Kamil al-Majid,
que a la vez eran yernos de Saddam Hussein, huyeron con sus familias a
Jordania.
El mismo encabezó la ofensiva jihadi que terminó con las
muertes de los desertores y su padre (hermano de al-Majid), y de otras
personas acusadas de traición.
Las rencillas familiares en tiempos de paz no impidieron
que Saddam Hussein pidiera ayuda a familiares de confianza en tiempos
de guerra.
Durante los bombardeos estadounidenses y británicos de
diciembre de 1998, al-Majid volvió a la frontera con Kuwait, donde fue
nombrado comandante de una región recientemente creada en el sur.
En 2003 ocupó de nuevo el puesto mientras Irak se preparaba para la guerra.
BOBBY: bueno yo creo que aki deberian hacer lo mismo con eso politico que se han hecho de dinero a tento a sus cargo politicos, bueno en realidad es que son todo iguales nadie hace nada pasan gobierno y cada uno coje su tajada y los que suben no pueden hacerle nada a los otro. pero oremos a Dios para que eso pronto se termine por que como vamos es para el presipicio.
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